Splinter Cell Conviction




Splinter Cell Conviction promete poner patas arriba la franquicia. Acostumbrados a juegos relativamente pausados que daban lo mejor de sí jugados con el método "ensayo y error", vais a notar todavía más que este juego dinamita gran parte de todo aquello que conocisteis y os presenta la vertiente más salvaje, frenética y violenta de la saga. Y, afortunadamente, no pierde ni un ápice de la estrategia que la convirtió en lo que es hoy.





Historia

En esta entrega nuestro agente especial favorito, Sam Fisher, ha perdido a su hija y lo único que tiene entre ceja y ceja es hacer que la persona responsable de su muerte pague. Y sospecha que hay algo gordo detrás del suceso, algo que salpica a "Third Echelon" la compañía para la que trabajó toda su vida.
No podéis imaginar el cambio que esta última entrega tiene para vosotros hasta que pongáis vuestras manos en el pad. Con la cara descubierta, Sam podrá volver totalmente locos a sus enemigos gracias a toda una gama de nuevas habilidades y posibilidades de interacción con el entorno que podría haber adquirido (en parte) del mismísimo Jason Bourne (eso no quiere decir que Sam fuera peor que Jason, era un estilo diferente, pero le han tocado a la hija y se ha cabreado...).

Controles

No sólo gozaremos de un intuitivo sistema de cobertura, que casi mejora lo creado por el gran Gears of War. Hay un nuevo sistema que marca nuestra última posición conocida por el enemigo y nos hará mucho más fácil entender que piensa el enemigo y averiguar cuál es la mejor forma de sorprenderle. Cuando ataquemos, y seamos avistados, veremos cómo nuestra silueta queda impresa en la pantalla en tonos grises; a partir de ese momento, tendremos que hacer todo lo que podamos para alejarnos de ese punto sin ser vistos, sabiendo que nuestros enemigos pensarán que seguimos ahí escondidos. No sabéis lo divertido que resulta jugar con ellos, podemos sorprenderles por una ventana, salir por esa misma ventana cuando nos descubran y entrar por la puerta principal, reventar todos los focos de luz para escondernos, usar las cañerías para sorprenderles desde una posición elevada... cualquier cosa, y todo combinado hace que cada partida sea un mundo.
Además, cada muerte que realicemos sin ser visto nos dará una bala certera que Sam encajará en la sien de quien escojamos de forma espectacular, y cuantas más seguidas, mejor, ya veréis.

Todo movido por un motor gráfico que, sin llegar a tocar el techo de la generación, supera al ya espectacular Double Agent, que no es mal precedente. Añadimos un apartado sonoro impecable del que destacamos un excelente doblaje, y encontramos una de las mejores aventuras que se pueden encontrar en la consola de Microsoft. Si buscas el mayor realismo y la mejor acción del mercado, a por él, no te equivocarás... Pero no dejes de empaparte con toda la información que tiene para ti el video-análisis completo, aquí.